Ellos exploran, interactúan, comparten, enriquecen su juego, se asombran, descubren, aprenden, discuten, ceden, preguntan, eligen, se divierten. Todo esto y más, a partir de las instalaciones y propuestas que les brindamos. Nosotras como docentes nos maravillamos con sus logros y disfrutamos compartiendo estas experiencias junto a ellos.
Al ingresar a la sala los alumnos se encontraron con diferentes propuestas navideñas:
Armados de sombreros de duendes navideños: Para ello tuvieron que escribir su nombre, utilizar la plasticola y manipular con cuidado el papel crepé.
Armado de árbolitos navideños: Para ello debieron manipular en forma correcta la plasticola.
Lectura por sí mismos de cuentos navideños: Mediante la observación de las imágenes y el diálogo con sus pares fueron poniéndole palabras a la historia, compartiendo el momento con otros.
Kuschelecke: un sector de la sala estaba dispuesto con almohadones y peluches para que los alumnos disfruten de un momento de tranquilidad, suavidad, ternura y mimos.
Un sector de construcción con bloques de madera, trenes y material no convencional , dispuesto en el ”bosque navideño” para que puedan construir y dar lugar a nuevos juegos dramáticos.